Transamerica

Vi Transamerica porque me daba curiosidad cómo habían tratado el tema del transexualismo y porque me encanta cómo actúa Felicity Huffman (Lynette de Desperates Housewives). Lo primero, me decepcionó un poco; lo segundo, no me defraudó en lo absoluto.

En esta historia Felicity Huffman interpreta a un hombre que desde hace ya algún tiempo ha asumido su rol de mujer. Sin embargo, siente que debe operarse para sentirse completamente femenina. En el proceso, se entera que tiene un hijo, fruto de su juventud. Hijo, que en cierta medida dificulta sus planes, pues debe encargarse de él.

La descripción del personaje y su desenvolvimiento cotidiano al pincipio de la película prometían más del desarrollo. Pero, no. Luego, la historia se vuelve demasiado enredada y para mí, con matices de sordidez típicamente relacionados con el tema del transexualismo. Pensé que iba a ser una pelìcula sobre alguien con una historia de vida sencilla viviendo una experiencia extraordinaria. No fue así.

De todas maneras, creo que vale la pena verla. La actuacíón de la protagonista es muy buena y, mal que bien, se preocupa al inicio de describir un universo desconocido para muchos.